Lo que los hombres piensan de las mujeres

Columna Exclusivo para hombres, de Yazmín Alessandrini, 25 marzo 2009.

En esta ocasión haremos una pausa, pare reflexionar acerca de tan singular forma de pensar y de las deducciones que ustedes, chicos, suelen concluir al conocer a una nueva chica, sin que ella se imagine que su actitud, lejos de ser apreciada por tan cotizado prospecto, seguramente será criticada despiadadamente con base en los cánones que el hombre ha adquirido a lo largo de su existencia, conformando un extenso abanico de ideas prejuiciosas, que dejarían helada a la fémina si esta pudiera leer el pensamiento. Por ejemplo, si la mujer toma la iniciativa al advertir que el prospecto peca de timidez, entonces la chica en cuestión es una lanzada. Sin embargo, si la chica muestra recato y espera con paciencia el cortejo del varón, es tachada de "apretada y mosca muerta".

¿Qué espera esta chica a la hora de recibir una invitación a comer por parte del varón que con toda caballerosidad le pregunta donde desea comer? Pues aquí y en este terreno es donde ella corre más el riesgo de ser sometida a juicio por tan arbitrario juez; si ella propone un elegante restaurante, automáticamente es una interesada, pero es mil veces mejor lo anterior, antes de aparecer como "corrientita" si se le antoja comer unos deliciosos, pero para él ordinarios taquitos ¡que bien que se los devora cuando se presenta la ocasión!

Y no olvidemos tocar el tema de la vestimenta. ¡Ahhh! Mucho cuidado, chicas, el vestir es de absoluto cuidado cuando uno de estos chicos se topa con ustedes, porque escote y minifalda, igual a "moral distraída" o digamos... traje sastre de diseño exclusivo con accesorios Louis Vuitton se traduce a "estirada, apretada y mojigata". Claro está que dichos apelativos serán más entendibles para aquellos a quienes es difícil aceptar a una verdadera fémina ejecutiva. ¡Pero también las mujeres tienen tela de dónde cortar! ¿Qué tal ese osado chico que con valentía se lanza a la conquista de la mujer elegida? Seguramente de mujeriego no lo bajarán, y peor si toma las cosas con cautela, porque entonces se convertirá en "lento", y hasta "lentiño" le dirán, y el peor de los casos sus preferencias sexuales serán cuestionadas por el grupito de amigas de la fémina elegida. Así que mucho cuidado con tratar de agradar a su pretendiente, haciendo, usando o comportándose tan lejos como puede de la realidad. Recuerde que no hay nada mejor que el ser genuino y, al mismo tiempo, aceptar a las personas tal y como ellas son.